
El día del trabajador es usado para conmemorar a todos los que trabajamos arduamente para hacer que nuestro país salga adelante. Todos los años, una foto se vuelve viral ese día: la de El Almuerzo sobre un rascacielos.
La historia detrás de esta fotografía es tan sorprendente como enigmática, pero también revela detalles sobre las condiciones laborales de Estados Unidos para la época.
Almuerzo sobre un rascacielos y como conmemora a los trabajadores

Almuerzo sobre un rascacielos muestra a 11 obreros sentados en una viga, con los pies colgando en el vacío, disfrutando de su momento de descanso. Algunos están comiendo, otros fuman, uno sostiene una botella que se presume contiene licor, y todos parecen estar conversando, aparentemente tranquilos, mientras Nueva York se extiende bajo ellos a cientos de metros de altura. Ninguno de ellos lleva arneses de seguridad.
A pesar de que muchos puedan pensar que la foto es un montaje, la respuesta es no. Estaban realmente sentados en esa viga, sin ningún tipo de seguridad, a una altura de 250 metros.
Sin embargo, uno de los secretos que rodean a la fotografía es que la actitud de los obreros no fue del todo espontánea. La imagen formó parte de una campaña publicitaria durante la construcción del edificio RCA en el Rockefeller Center, en 1932, en plena época de la Gran Depresión. El propósito de esta campaña era promover la industria inmobiliaria en Nueva York.
Para lograrlo, se planearon minuciosamente las poses y se creó un entorno cuidadosamente diseñado, aunque natural. Esta fotografía no fue la única de la mencionada campaña; existen otras menos conocidas pero igualmente sorprendentes que ayudaron a impulsar el mercado inmobiliario en Nueva York. La imagen fue capturada desde el piso 69 del Rockefeller Center el 20 de septiembre de 1932 y, aunque sorprendente, sigue siéndolo hoy en día, aunque por diferentes razones.
¿Qué mensaje quiere transmitir esta fotografía?

A primera vista, Almuerzo sobre un rascacielos pone de manifiesto la precariedad de las condiciones laborales en los Estados Unidos durante la Gran Depresión. La crisis de 1929 dejó a la sociedad prácticamente sin empleo, lo que llevó a que se aceptaran trabajos inseguros y precarios por necesidad.
En cuanto a la autoría, no se ha podido determinar con certeza quién fue el fotógrafo valiente que capturó la imagen, tan valiente como los modelos. Los archivos la atribuyen a un autor anónimo, pero se ha sugerido que Charles Ebbets o Lewis Hine podrían haber sido los autores más probables. Hasta la fecha, no se ha encontrado evidencia que respalde a uno u otro.
Otro aspecto que guarda la imagen, aunque se menciona en los archivos, es que la viga no estaba completamente suspendida en el vacío; había un piso completamente terminado a pocos metros debajo, lo que hacía que una caída no fuera necesariamente fatal.
Sobre los obreros, se sabe relativamente poco. La mayoría de ellos eran inmigrantes, en su mayoría de origen italiano e irlandés, aunque en años recientes se ha identificado a uno de ellos como Natxo Ibargüen Mendata, un vizcaíno.
En resumen, la icónica fotografía “Almuerzo sobre un rascacielos” nos ofrece una poderosa visión de las duras condiciones laborales durante la Gran Depresión en Estados Unidos, mientras que revela el ingenio publicitario detrás de su creación. Esta imagen continúa siendo un símbolo de la valentía de los trabajadores y la importancia de la seguridad laboral, a pesar de los misterios que la rodean.Ahora que conoces la historia detrás de Almuerzo sobre un rascacielos, la fotografía más icónica del Día del Trabajador, seguramente tendrás algo que comentar al respecto.