Un estudio reciente ha revelado por primera vez el sorprendente hallazgo de hormigas enredadas en plástico, lo que pone de relieve el impacto de la contaminación humana en los insectos.

La investigación se llevó a cabo en la isla española de La Palma, donde se encontraron hormigas atrapadas en fibras de plástico cerca de rutas de senderismo y carreteras, lo que sugiere claramente la existencia de un vínculo entre este tipo de contaminación y la actividad humana.
Mientras investigaban especímenes de hormigas, los científicos Armand Rausell-Moreno y J. Manuel Vidal-Cordero observaron los materiales sintéticos que las envolvían, por lo que se trata de un hallazgo sin precedentes que suscita preocupación por el impacto de los plásticos en los invertebrados terrestres.
El descubrimiento de hormigas enredadas en plástico plantea un preocupante problema medioambiental con diversas implicaciones potenciales. Los investigadores sobre el terreno observaron los materiales sintéticos enredados alrededor de las hormigas durante sus exámenes preliminares.

Para confirmar el origen sintético de las fibras, enviaron muestras a un laboratorio con experiencia en análisis de fibras de plástico, que empleó un protocolo publicado para verificar sus hallazgos.
Este parece ser uno de los primeros casos de enredo de este tipo en insectos observados sobre el terreno, lo que plantea interrogantes sobre el alcance de este problema y sus repercusiones en los invertebrados terrestres.
Aunque algunos estudios han demostrado la ingestión de microplásticos por lombrices de tierra y colémbolos en laboratorio, el alcance total del problema, especialmente en entornos naturales, sigue sin estar claro.
Es necesario seguir investigando para comprender mejor las interacciones entre los plásticos y los insectos, sobre todo los de menor tamaño corporal, que pueden ser menos perceptibles para el público en general, pero que podrían ser importantes en términos ecológicos.